Vistas de página en total

domingo, 21 de febrero de 2016

LA CONSTANCIA




Por ahí vamos a caminar, con la constancia y firmeza para conseguir nuestros propósitos.
Si he llegado hasta aquí es por qué en un momento determinado creí firmemente que era esto lo que quería y sigo pensando con la misma firmeza y convicción que mi camino no va a parar en ninguna esquina ni en ningún callejón por miedo a no llegar. Llegar a mi objetivo llegaré aunque sea un poco más despacio. Las prisas, a veces,  no son buenas consejeras. Si tengo que parar, pensar, coger impulso y continuar...lo haré. No sé si en ese mismo orden pero si desde esa inmensa paz que siento dentro de mi.
Por qué equivocarme, estoy segura que lo he hecho muchas veces, pero también estoy segura que ni a sido con malas artes ni adrede, más bien sin ser consciente de mis errores hasta que ha pasado un lapsus de tiempo y he recapacitado de esa "mala" acción.
Para seguir nuestro camino, muchas veces es necesario soltar lastre, aunque sé de mucha gente que es capaz de acumular y acumular sin soltar y no estallar. Admiro esta actitud, ya que yo me siento incapaz.
Soltar lastre para mi no quiere decir en absoluto romper con nada, deshacerte de nada o dejar de ver o hablar; significa hacer una introspección y aprender a perdonarte; si no lo haces, estarás atrapada en un rencor propio que te paralizara en muchos aspectos de la vida.
Hoy puedo decir que a fecha de hoy estoy orgullosa por qué puedo decir con el corazón en la mano que no tengo enemigos. Los he perdonado y me he perdonado consiguiendo romper cualquier atadura.
¿Como lo he hecho? Con constancia, sabiendo que era lo que quería y dibujando ante mi un futuro lleno de sonrisa y felicidad y sobre todo practicando el : ¿y tu que harías en su lugar?.
Somos libres de elegir, de escoger el camino que queremos seguir en la vida, pero no somos libres para dañar ni para mantener el rencor y el resentimiento en la mochila.
Es un trabajo del día a día.








No hay comentarios:

Publicar un comentario