Vistas de página en total

martes, 11 de octubre de 2016

TENEMOS DERECHO




Tengo derecho a ser políticamente de izquierdas o de derechas, o a ser apolítica.
Tengo derecho a ser como soy, a mostrarme y ser feliz con lo que siento.
Tengo derecho a que se me respete, a que si no te gusto me ignores, a que no me odies ni me increpes constantemente.
Tengo derecho a ser diferente a ti y a poder pasearme por las mismas calles por las que paseas tu y que no te metas conmigo.
Tengo derecho a ser atea o a practicar cualquier religión. Incluso tengo derecho a rezar si me da la gana.
Tengo derecho a poder ser feliz con mi forma de pensar, que no tengas que cambiármela para pensar igual que tu, que pueda expresar en cualquier lugar como y lo que pienso.
Tengo derecho a tener mi propio aspecto, a ser gorda o flaca, alta o baja, guapa o fea.
Tengo derecho a que me respetes por el simple hecho de ser persona, a que no me califiques de estúpida o tonta, a que me dejes progresar adecuadamente y no me trates con ese desprecio típico de aquel que se cree más que los demás.
Tengo derecho a vivir, a protegerme de tus frustraciones, a no tolerar tu comportamiento autoritario y cínico, cuando aún sin conocerme, te permites el lujo de hablar mal de mi.
Tengo derecho a decidir; a decidir lo que quiero ser, a ser rico o pobre, a quejarme, a enfadarme y hasta tengo derecho a protestar...como lo hacemos todos.

Por eso quiero decirte que igual  que yo tengo derechos, también los tienes tú. Que tu y yo, en eso de los derechos, somos iguales. Que si yo lucho por mis derechos también lucho por los tuyos y que no pienso quedarme en casa cruzada de brazos mientras otros hacen lo que es mi deber, ni dejarme abandonar a eso que llaman suerte.
Solo por nacer tenemos derecho a vivir y mi conciencia me dicta que todos tenemos derecho a hacerlo de la mejor forma posible.
Si tu no quieres defender tus derechos -los nuestros- al menos deja que lo hagamos los demás. Respeta.


                                                  "Cualquiera puede enfadarse, eso es algo muy sencillo.
                                                                     Pero enfadarse con la persona adecuada, en el grado exacto, 
                                                                     en el momento oportuno, con el propósito justo y del modo 
                                                                     correcto, eso, ciertamente, no resulta tan sencillo"
                                                                                                         Aristóteles. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario