Así es como se encuentra el embalse de Arenós a fecha mayo/junio de 2024. , al 21% de su capacidad. Una pena. Desde hace casi ocho años que estoy por estos parajes, nunca lo había visto así de bajito, vamos sin agua. Su principal uso es la agricultura aunque evidentemente no es el único. También se puede admirar y fotografiar un paisaje que es una autentica maravilla.
Y diréis, ¿esta de qué va?
Voy a intentar en este post despertar la conciencia y estimular nuestros sentidos a ser conscientes de su uso y del derroche que en muchas veces, sin darnos cuenta, realizamos.
El agua es un bien natural, necesaria para la supervivencia de todos los ecosistemas, no solo para el humano. Es beneficiosa para nuestro organismo y del resto de los seres vivos. Sin agua no podría existir vida en el planeta. Pero todo esto ya lo sabemos.
Por culpa del cambio climático, de la falta de lluvias, del mal uso que hacemos en general, nos acosa una escasez de agua para antes de 2030 pero, si la cosa sigue así, tendremos problemas muy graves para 2050.
Pero ¿Qué va a pasar si se acaba el agua? (Os anticipo que no es imposible) Afectará a la agricultura, la ganadería, la industria produciendo escasez de alimentos; desaparición de especies vegetales y animales y seremos un gran desierto.
No sé si estaré para entonces, pero me importa mucho los que vienen por detrás. Somos unos auténticos egoístas. Nuestros antecesores no nos dejaron un planeta perfecto pero sí mejor que el que vamos a dejar a nuestros descendientes.
Una vez a la semana me acerco a vigilar el pantano, ver como va de capacidad y sintiéndome impotente por no poder hacer nada. ¡Tiene que llover! Eso es mentira. No podemos quedarnos con los brazos cruzados esperando a que llueva. En mi casa mismo no hay conciencia de las grandes medidas que podemos aportar al planeta sin mucho esfuerzo.
Estoy indignada después de ver como nos dejamos grifos abiertos, como nos pegamos unas duchas de media hora, como tiramos la cadena veinte veces o como dejamos correr el agua para que nos llegue más fresquita. Todas estas cosas las podemos corregir si pensamos un poco en todos y no solo en nosotros mismos; o peor aún si pasamos de todo!!!.
Algunos datos:
- Un baño gasta 15 veces más que la ducha y una ducha de 5 minutos gasta 50 litros aproximadamente.
- Un grifo abierto mientras te lavas los dientes gasta 6 litros, mientras que si lo cierras, gastas 0,5 litros.
- Al fregar y poner la friegaplatos también se desperdicia un montón de agua.
Hay muchas medidas que se pueden adoptar pero la principal es SER CONSCIENTES.
Ojala esto cambie y reaccionemos antes que sea demasiado tarde. Me gustaría que se inventará un chip que leyera el consumo individual de cada uno y se limitara la cantidad. Una vez llegado al límite diario te quedas sin agua. ¿Te imaginas? "Pip-pip-pip le quedan 50 litros de agua de su computo diario" ¡Se acabaron las duchas de 30 minutos!
Hay una lista de recomendaciones que quiero adjuntar, que igual todas juntas y resumidas podemos recordarlas en nuestro día a día:
1) Ser consciente
2) Ducha en lugar de baño
3) Cierra el grifo mientras te lavas los dientes
4) El inodoro no es una papelera
5) Evita perdidas de agua
6) No enjuagues los platos antes de meterlos en el lavavajillas
7) Llena la lavadora y el lavavajillas
8) Usa reductores de caudal o aireadores
9) Electrodomésticos + eficientes energéticamente
10) Riega plantas y jardines de noche
... Y ojo con la luz y con el aire que también nos tenemos que concienciar...
